La catedral del silencio
04.07.2012 23:56
En la soberbia catedral del silencio
los ecos son puros
tan puros al menos
como las ondas encarceladas
que suavemente agitan
las superficies enclaustradas
de la humilde iglesia sumergida
El origen sería algún roedor
o alguna cucaracha encapuchada
nieta, bisnieta
de la que sufrió el sumergir de todo un pueblo
con sus infinitas historias y recuerdos
Y los colores,
sus colores,
… que me pertenecen
Prevendas del testigo,
nadie se quejará
pues nadie ententenderá ni mi codicia
ni mi tesoro
Prevendas del testigo
estar ahí cuando la noche externa cubra a la interna
y giren sobre sí los cuatro mundos
mientras respiras tranquilo y pleno
la irisada soledad compañera
No me delatará el sortilegio de la falsa ave nocturna
ni me fallará el amor que eterno sostiene en mi vida, la vida
En el umbral ausente de la comunidad iluminada
las cosas tan solo suceden...
Y es prevenda del testigo
estar ahí
Libre, volado, dulce, amoroso y ardiente, ardiente y amado.
..