Mi querida ausencia
30.03.2021 16:57
Se tranquiliza el mar
Se tranquiliza…
Ante mi calma
Cede, sedoso, su arrogancia
Es mi poder…
Y faldero se deja acariciar
Pero interfieren
inoportunas
cafeteras desbocadas,
voces chillonas de mujeres desconectadas de sí mismas
y santos niños caballeros de la orden del aquí y ahora
Al tiempo
en que liberan al presente
sus rítmicos sonidos
las viejas canciones ,
enlatadas
Y aéreas
claman festivas al cielo
jóvenes pieles afrutadas
Lejana e indiferente
sobre la transparente arena de la orilla adormecida
sortea brisas dulces
una bandera verde,
que, paradójica,
reclama mi retirada
Es entonces,
al reinicio del paseo,
cuando corre a mi encuentro
como tantas veces
mi querida ausencia
Tan repleta de todo y nada
Tan bella
Le gusta sorprenderme en mis caminos vacíos
Y deslumbrarme con sus relucientes trajes de impermanencia
Y amo siempre ese momento
cuando entre la gente y el mar
le tomo su mano ensoñada
y percibo el aroma dulce
de su radiante inexistencia
Ese momento…
en que nuevamente entrelazamos
la alegre curiosidad de sus silencios
con la austera fantasía de los míos.