Sobrevuela la Gran maga
Los horizontes ultramarinos
Las dilatadas distancias desérticas
Las sombras del Nilo
Inagotable sed de amor
No cederá a la desesperación
ni al agotamiento
ni al fracaso
No se creó para ella
ni el olvido, ni la soledad
Señora de Hebet, Señora de Abaton
Señora de Raanefer
Señora de las pirámides
Señora de los países del sur
No conocerá el desaliento
No le penetrará la rendición
Trascenderá el amor sus alas
De un suave soplo, florecerán las claridades
en sus madrugadas
y se confabularán en su ayuda
los vigías de las naturalezas aureadas
Fuerza fecundadora
Ojo de Ra, corona de Ra-Heru
Diosa de la maternidad
El dolor incontenible
de la ausencia amada
le hará rasgar las vestiduras
mientras talla, diamantina
la esperanza
Sobrevuela la gran maga
Tras las huellas del dorado cofre...
cuando en Fenicia le alcanza la paz
al corazón roto
Más las lágrimas vertidas
a los pies del tamarindo
no darán vida al amor perdido
Será la ciega luz del coraje enamorado
la que venza al destino
La que reencuentre a los catorce
para radiante retorno del Uno
https://es.wikipedia.org/wiki/Isis